La columna de Erika Rivero Almazán
Nosotros hicimos el ofrecimiento formal a Alejandro Armenta para que sea nuestro candidato a la gubernatura de Puebla; me confesó hace dos semanas una de las personas más cercanas a Dante Delgado. ¿El motivo? Pues que sería un “candidatazo” para Movimiento Ciudadano; y me recordó una entrevista con Roxana Luna, presidenta del Consejo Nacional del PRD, de hace dos meses, en Los Conjurados: “El PRD haría un gran papel si presentara ante la Alianza un candidato como Alejandro Armenta, sería una gran figura que nos uniría a todos para ganar Puebla”.
La semana pasada, el columnista Mario Alberto Mejía expuso como portada de su diario que el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés le había corrido la invitación a Alejandro Armenta para que sea su candidato a la gubernatura; mientras el periodista Ricardo Morales tituló su columna el 26 de marzo: “Movimiento Ciudadano quiere a Armenta”.
¿Desde cuando Alejandro Armenta se convirtió en el objeto del deseo de los partidos de oposición?
La respuesta del senador fue y hasta el momento ha sido la misma: “Seguiré siendo fiel a mis convicciones: estoy con el presidente
AMLO y con MORENA”.
¿Por qué quien aparece en primer lugar en las encuestas debe aclarar una y otra vez que no se saldrá de las filas morenistas?
¿No suena ilógico que el gran favorito de Morena para la gubernatura siga recibiendo invitaciones del resto de los partidos políticos adversarios para que sea su abanderado?
Y es que en el juego de las percepciones y de las líneas discursivas dentro y fuera de MORENA se maneja que el diputado Ignacio Mier Velasco será la imposición del presidente, sin importar su nivel de conocimiento y aceptación que reporten las encuestas.
La “cargada” a favor de Nacho es evidente en los actos proselitistas al interior del estado, y ya sean acarreados o nó, se multiplica la máxima de “es el favorito del presidente” entre los cientos y miles que llegan a su encuentro.
A mi manera de ver, chico favor le hacen estas voces “afines” al diputado al repetir esa frase, que ya hoy parece ser la verdad absoluta- Y es que un perfil como el suyo, que se mueve en las altas ligas de la política nacional, seguro busca llegar por méritos propios a ocupar esta posición y no por un regalo a los favoritos del señor presidente. Eso lleva un costo antipopular que en nada lo ayuda, ¿quién querría comerse esa manzana envenenada?
Si Nacho Mier busca promover su imagen, colocar 200 espectaculares y retomar giras intensivas en el interior del estado es porque nadie la tiene segura, y, por supuesto, que el diputado quiere hacer su trabajo, crecer en las encuestas y obtener la intención de voto. Si no, para qué tanto brinco estando el suelo tan parejo.
Ya se verá en un par de meses si este trabajo se refleja en sus índices de aprobación en las encuestas. Por el momento, se mantiene a la par del secretario de Gobernación Julio Huerta, ambos superados por la exalcaldesa Claudia Rivera (aunque usted no lo crea).
Eso por un lado.
Y por el otro, Alejandro Armenta lleva un buen rato remando en las filas de la 4T, y las tendencias nacionales marcan que las preferencias electorales las lleva MORENA, que aunado a su trabajo tanto como senador como su desempeño de tierra en el estado durante décadas, espera que le rindan frutos para convertirse en el candidato de su partido; con todo y de que su cercanía con el presidente no sea tanta como la de Nacho y pese a la rebeldía de su amigo y aspirante a la presidencia Ricardo Monreal.
Armenta reafirma que su partido es MORENA. Por algo será.
Falta más de un año para las elecciones; esta historia preelectoral poblana está llena de matices e intrincaciones, como el de la posibilidad real que la normativa electoral toque mujer en la candidatura a la gubernatura, de que pierda el PRI su último bastión de poder, de que Monreal llegue o nó a la candidatura de Ciudad de México, que el cabecita de algodón le pique una abeja africana y cambie de posición su gran dedo electoral…
O de que en los partidos políticos de oposición se construya una conjura para formar una gran alianza para derrotar a MORENA con un buen candidato.
Ya lo veremos.
Y el factor sorpresa claro que puede aparecer en cualquier momento. Comprobado está que en Puebla puede pasar todo.