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Los Conjurados, la columna de Erika Rivero Almazán

Está midiendo 8 estados, Puebla entre ellos, Rodolfo Rivera Pacheco, quien devela los vericuetos de los números, porcentajes y tendencias de las encuestas que se publican, pero también, y las más importantes: las que no se publican.

Ni se publicarán.

Para el director del Buró de Estrategias y Análisis del Poder A.C., con 22 años de trayectoria y experiencia a prueba de elecciones, compartió para Los Conjurados una reflexión ante las mediciones de las elecciones próximas a realizarse el 6 de junio:

  1. Las encuestas que se publican no influyen en la decisión en el electorado. Eso es un mito, siempre lo he dicho en mi programa, en las conferencias que he dado y lo veo en mi trabajo profesional.
  2. Los políticos piensan que si publican una encuesta en la que se de a entender que va ganando, va a jalar a más votos, o a que los indecisos se decidan. Eso, en la práctica, no es verdad. No es como las redes sociales, que entre más ‘likes’ presentes te hacen más popular.
  3. Es más, puede resultar contraproducente: cuando tu publicas una encuesta en donde vas arriba, le estás avisando a tus adversarios que se pongan las pilas. Y sí sucede: los contrarios se ponen a trabajar más, y preparan más estructura para que su gente salga a votar.
  4. Esto le pasó en la elección del 2012, cuando Enrique Peña Nieto empezó a sacar sus encuestas que lo ubicaban en el primer lugar de las preferencias: los de Morena se pusieron a trabajar mucho, y si hubiera durado la elección un mes más, hubiera ganado AMLO, porque Peña ya venía en caída. Y como este ejemplo, hay muchos.
  5. Las encuestas publicadas no ayudan a ganar. Los candidatos se han formado ese mito, perjudicando a los encuestadores, porque ahora resulta que publicar encuestas definen una elección, ¡yo qué más quisiera!
  6. A los mexicanos no nos gustan las cifras, pocos realmente analizan el contenido de una encuesta, a los medios le gusta mucho publicarlas porque es parte de la información interesante que se tiene para polemizar una elección, pero nos pasan a perjudicar a los encuestadores: yo antes podía publicar libremente mis encuestas a cada rato. Ya no puedo. Nadie puede. Ahora debemos decir quién la pagó, quién la encargó y registrar la metodología. Y si no, te multan.
  7. ¿Qué el 6 de junio es una elección atípica? Es una elección intermedia en donde se juntaron muchos cargos a elegir. Ya lo vivimos en el 2018 en donde elegimos todo.
  8. Lo que veo es que Morena, a nivel nacional, gracias al impulso de AMLO está muy bien calificado. ¿Qué si están locos los mexicanos, los poblanos? Yo no sé, no soy psiquiatra. Yo sólo mido tendencias, y el presidente está muy bien calificado, con un 60 o 70% de aprobación. En Puebla es del 56%. Esto ayuda mucho a su partido. Si a esto lo aunamos, la pandemia y la vacunación en los últimos 2 meses, ayuda más a AMLO al presidente. Cuando encuestamos a quienes salen de recibir la vacuna que con cuánto califica al presidente del 1 al 10, muchas personas nos responden “¿se puede 20?”, no es mentira, es real. Ninguna encuestadora seria puede negar esta tendencia.
  9. Pero también en las últimas semanas han pasado cosas que afectan al Morena: es demoledor el accidente del metro, sobre todo en la ciudad de México. En Puebla, el caso de Saúl Huerta, principalmente. Las 4 diputaciones federales de Morena, a excepción del 12, las ganaba cómodamente Morena, hoy las cosas no están tan holgadas. Morena bajó entre 5 o 6 puntos. No más. Si bajó, pero no lo que creen.
  10. Me he preguntado seriamente cómo los mexicanos cambiarían la opinión de López Obrador. De verdad, le dicen ‘mi cabecita blanca’, ‘el mejor presidente del mundo’ y cosas así. En broma, me imagino que tal vez que el Peje robara un banco, o algo así, pero capaz que la gente piense “se lo merecen los bancos”. Repito, no soy psicólogo. Yo sólo analizo números. La mayoría de los mexicanos están obsesionados con aprobar a López Obrador.
  11. En Puebla se dice que Eduardo Rivera ‘arrasa’ en la capital, con hasta 19 puntos. Ese es otro mito. ¡Aguas con las encuestas telefónicas!: hay 4 encuestadoras que dan por ganador en la capital por 15 y hasta 20 puntos. Esto no es así. Su grado de error, de sesgo es muy alto, y de interpretación, aún más. No son encuestas por celular sino a domicilio. Y la mayoría, ya no tenemos teléfono en nuestra casa, salvo en la zona conurbada de Puebla, es por eso que presentan una alta tendencia panista, por ser clase media. Y de ahí salen esos números. No mienten, pero son inexactos para su objetivo de medición de preferencia electoral. Imagínate, si habrá teléfono en casa en Xaxamayo, San Miguel Espejo, Resurrección o Canoa, ¡claro que no!
  12. Para que tengas una idea: hay registradas 12 millones de líneas telefónicas residenciales y hay 120 millones de celulares. Tengo amigos encuestadores a quienes respeto mucho que hacen este tipo en encuesta. Yo prefiero otro método: domiciliarias, que es la que me ha resultado a través de los años.
  13. Las tendencias electorales en la capital de Puebla que yo traigo, desde el año pasado, va arriba Morena como partido, en comparación con PRI-PAN. Ahora, la tendencia se redujo, pero mis números me arrojan que va arriba Morena.
  14. ¿Es efectiva la alianza PRI-PAN? No. Porque no se suman los votos de un partido a otro: se sumó el rechazo. La gente se sigue acordando de lo que considera un mal gobierno del PRI o del PAN.
  15. En esta elección la marca tiene mucho que ver: cuando se junta un buen candidato con una buena marca, ya está del otro lado. Por ejemplo, en Nayarit, Veracruz o en Tlaxcala: Lorena Cuellar va 15 puntos arriba, sin problema, porque Morena era el partido mejor posicionado, sumado a una candidata que iba arriba en todas las encuestas.
  16. En caso de Puebla, es distinto: considero que la contienda es mucho más cerrada de lo que están publicando, y que cualquiera puede ganar.
  17. Eduardo Rivera o Claudia Rivera pueden ganar.
  18. Ojo, la marca aquí es importante, y la tendencia nacional le da una ligera ventaja a Morena, mientras la alianza PAN-PRI, le da desventaja.
  19. Por ejemplo, esto ya es una opinión personal: fue demoledor ver a Eduardo Rivera con un chaleco rojo del PRI. Imagínate a un panista de la UPAEP, que se muestra con las siglas del PRI, con el enemigo histórico, con “los masones perversos”. Fue un ‘shock’. Fue una estrategia equivocada.
  20. ¿Las tendencias en el estado? Lo digo yo, pero también está publicado en El País, el mejor periódico de España, o Alejandro Moreno, extraordinario encuestador que publica su trabajo en El Financiero. Marcan una tendencia a favor de Morena, y el rechazo a la alianza PRI-PAN.
  21. El tema de la reelección fue rechazado por la gente, sin importar el partido que lo presente. En historia de México, nos inocularon el rechazo a la no reelección. Aquí dependerá de 3 factores: el personaje, el partido, y los resultados de gobierno que haya dado. Ese es el caso de San Andrés Cholula con Karina Pérez Popócatl.
  22. ¿Arrasará Morena como en las elecciones del 2017? No se presentará el mismo fenómeno. Por supuesto que no. No viene en la boleta AMLO, que provocó que muchos de Morena, unos auténticos desconocidos, ganaran. Además, ya lleva 2 años de desgaste, los escándalos, el metro, la gestión en Puebla que está mal calificada, Saúl Huerta, en fin. Morena ya no es la aplanadora.
  23. Ojo: van a perder el registro dos o tres partidos pequeños. Peligran Fuerza por México, Redes Sociales Progresistas, entre otros. No llegan ni al 1% cuando necesitan, por lo menos, el 3%.
  24. Mi hipótesis es que a AMLO y a Morena, todavía les alcanzará para ganar la mayoría de los escaños en el Congreso de la Unión. En el Congreso local, también, aunque ahí va a ser mucho más competido.
  25. Quien dude de mis números, lo invito al ‘reto BEAP’: le pongo una gorra, que me acompañe a encuestar, que compruebe mis números, y si me equivoco, le regalo al BEAP.