Se dan por los rumores, de boca en boca, en grupos de redes sociales, como el caso del 10 de junio, cuando el abogado Daniel Picazo fue linchado en Huauchinango.
Redacción Los Conjurados
De 2015 al 2022, los linchamientos aumentaron 23 por ciento; así lo advirtió la abogada penalista Mari Badillo.
Entrevistada por la periodista Érika Rivero Almazán, explicó que este fenómeno ocurre como un aviso de la población a la autoridad para hacerle ver que «ellos mandan», o para mandar un mensaje a delincuentes, que no entren en dicha zona, para darles un «escarmiento», aunque remarcó que se trata de actos injustificables.
Se dan por los rumores, de boca en boca, en grupos de redes sociales, como el caso del 10 de junio, cuando el abogado Daniel Picazo fue linchado en Huauchinango.
Lamentó que las y los diputados del Partido Acción Nacional perece que solo están «de adorno», pues no han intervenido para que desde el Congreso del Estado se pueda combatir esta situación.
ELLA MISMA ESTUVO A PUNTO DE SER LINCHADA
Mari Badillo comentó que el 19 de enero de 2009 ella pasó una situación similar, pues fue a ejecutar una orden de aprehensión en Cañada Morelos, pero al ingresar, la mujer a la que iban a detener comienza a gritar que la iban a secuestrar, lo que generó que altavoces en la comunidad sonaran y las campanas repicaran, situación que agitó a la gente.
Narró que rápidamente la gente llegó con mecates y gasolina, por lo que piensa que la querían colgar y quemar. Expresó que aunque se identificó con su cédula profesional, no le hicieron caso.
En ese sentido, mencionó que logró pedir auxilio a la FGE, y aunque se pidió apoyo a los elementos municipales, hicieron caso omiso.
«La gente se deja llevar por los rumores, por lo que dice uno del otro. La gente no ve más allá porque no te deja explicar, no te escucha. Los linchamientos te dejan en total estado de indefensión, pues la fuerza de una persona no se compara con la de una multitud», expresó.