Dijo que el tema fue politizado, y que incluso Morena incurrió en malinformar a la población, pues afirmó que planteó que se trataba de un nuevo impuesto, aunque era un derecho, y que no se trató de un tarifazo.
Redacción Los Conjurados
Eduardo Alcántara Montiel, coordinador de los diputados del Partido Acción Nacional en el Congreso de Puebla, consideró que el que no se haya aprobado el Derecho de Alumbrado Público en la capital de la entidad además de San Andrés y San Pedro Cholula fue una dura lección para el PAN, pero también para el presidente municipal capitalino, Eduardo Rivera Pérez, aunque no quisiera asumir el costo político.
Durante el programa Los Conjurados, la periodista Érika Rivero Almazán preguntó para quién fue el golpe político: ¿para el Gobernador Miguel Barbosa?, ¿para el edil capitalino?, ¿el PAN?, a lo que respondió que fueron diferentes impactos, pues hubo varias vertientes y aristas, y que lo complejo es mostrar lo más oculto.
Aunque dijo que votó a favor del DAP, no lo hizo para apoyar a Eduardo Rivera.
Explicó que se trata de un cobro que lleva más de 30 años en Puebla, que incluso la gente ni se daba cuenta, pues en los recibos aparecía porcentaje de 6.5 por ciento, aunque el dinero la Comisión Federal de Electricidad lo abonaba a lo que los ayuntamientos pagaba por alumbrado público.
A partir de 2005, empresas se ampararon, y pues calificaron la situación como injusta; la Comisión de Derechos Humanos determinó que había un mal cálculo, por lo que con este antecedente, después de 15 años llegó a la Suprema Corte de Justicia, que a su vez falló que era inconstitucional la manera en que se cobraba, no en sí mismo.
LA POLITIZACIÓN DEL TEMA
Con este contexto, dijo que el tema fue politizado, y que incluso Morena incurrió en malinformar a la población, pues afirmó que planteó que se trataba de un nuevo impuesto, aunque era un derecho, y que no se trató de un tarifazo.
En ese sentido, Alcántara Montiel dijo que todo mundo dudó, incluso del PAN con argumentos válidos en el afán de generar diversidad y pluralidad, pero que representó un costo político para muchos, entre ellos Eduardo Rivera, aunque no lo quiso asumir.
Lamentó que al subir la discusión parecía que si se aprobaba por Morena y PRI, pero el PAN no sacaba mayoría de votos, ¿por qué algunos panistas tendrían que cargar el costo?, es decir, ¿por qué los municipios del Albiazul tendrían un beneficio si no asumían parte del precio?
De esa manera, dijo que actuó como coordinador, pues él está a favor que le vaya bien a sus gobiernos, entre ellos el de Eduardo Rivera; trató de mediar con diputados, aunque no puede dejar sueltos a los ediles, por lo que se sostuvo hasta el final, porque consideró que el DAP estaba bien hecho y no era inconstitucional jurídicamente hablando.